Creamos en nuestra creación, creamos ángeles a nuestra semejanza, como mejor nos parezca . conservemos la imagen ideal del ultimo que se nos fue. ángeles sonrientes que nos sorprendan cada mañana, no el ángel de la espada y de las llamas, sino el ángel de la luz que nos transmite la memoria, los ángeles invisibles que nos recuerda el viento para despertarnos y la brisa que nos saluda los ángeles que nos sorprenden con el capricho de las simientes