Como una piedra
resistiré los embates
de la eternidad
más cruel de todos los tiempos
Como una piedra
rodaré por los precipicios
suicidas
Por las alturas más imposibles
Como una piedra
esperaré firme tu amor, Arantza
sin claudicar
y con la convicción de tu amor
Como una piedra rodaré
cuesta abajo buscando
la verdad del mundo
y de mi espíritu