José Ángel Pineda

Dulce boca de una flor

Dulce boca de una flor

que te abres

por los caminos de una abeja

pequeña frágil, miel que busca

en un sorbo de jardín...

 

Eres la dulce boca de esa flor

que te abres en seducción

cuando al oído quieres algo

y se cierra la redacción

de un pensamiento

cuando los detalles

sobrepasan la muerte…

siento un horno, una llamarada,

un fuego, una explosión.

Las estrellas

las realidades

las verdades, lo cierto

se propone meditar

sobre lo incierto.