Tal vez, logré crear el mundo perfecto, ese mundo que tú buscabas para ser feliz, y no se cómo lo hice, pero sucedió, y me alegro que disfrutes vivir en el, pero como todo creador debo de poner dificultad a ese mundo, tal vez sea dejando de hablar como antes, o tal vez enamorándome, por qué no hay peor tortura, que saber que le gustas a aquella persona que te dio toda su confianza.