MIGUEL CARLOS VILLAR

“El amén de las almejas”  (Un guiño a Salvador D.)

 

Oníricos torbellinos

arrasan necrópolis de crisálidas

en

desvaído yermo paisaje

de

estilizados elefantes y rugidores leones.

*

Atávicos cánticos

acompañan la huida

en

pulverulento pataleo

de

descarnados equinos.

*

Aullidos de centollos

tiñen un horizonte 

que se descalabra

tras las columnas

de

un vigilante Hércules.

 

Mientras….

 

…Suplicantes almejas

bosquejan,

de la mano de Dalí,

un porvenir ceñido

de

enigmáticas tinieblas.

***