No vine a este mundo por dinero,
ni por premios, ni por fama,
no vine a este mundo para vender ni a comprar nada.
No vine a este mundo a esclavizarme a una idea,
ni mucho menos al ego,
no vine a este mundo a fingir que soy feliz,
porque soy más que eso...
¡Vine a vivir y a morir!,
vine a reir y a llorar,
vine a descubrir mi verdad,
vine a sentir placer y dolor,
a dejar todo mi odio y todo mi amor...
¡Vine a gritar y a echar mi voz al viento!,
vine a cantarle al mar y a susurrarle a la noche,
vine a plasmar una emoción, un sentimiento,
vine para sumergirme en la naturaleza,
en las alturas de una montaña o en el corazón de un bosque,
porque allí vive Dios, nuestro lugar de nacimiento,
voy para conversar con las plantas,
que me regalan su sabiduría...
Voy para apreciar las estrellas y su calma...
No vine a este mundo para llevarme nada,
porque simplemente vine, a dejar el alma.