mi pasado me extrajo con cuchillo,
la rojiza cascada de mis venas,
desangró la tristeza de mi penas,
salpicando dolor por el pasillo.
me supuse escapar es tan sencillo,
de la vida y de toda sus condenas,
los recuerdos pasaban por escenas,
y cantaba la muerte en el altillo.
me salí de mi cuerpo en un segundo,
y miraba el final de mi existencia,
entendí la respuesta de mi suerte,
que me dijo con odio tan profundo,
escapar es inútil, ¡QUE INSOLENCIA!
los recuerdos perduran en la muerte.
Pablo Berkell