Allen Andree

INCOMPLETO

Desequilibrios incomprensibles

Cansancio del espíritu y del cuerpo

Cansancio de uno mismo

 

Ojo que escucha y siente

No más observación

Estamos cerca de un colapso que se acerca

 

Seremos los pioneros de una época violenta

No habrá exilio que valga

Ni convicción que alivie estas heridas

 

Estamos cansados de llevarnos a nosotros mismos

No somos dignos de ninguna herencia

Porque le tememos a la vida

 

Existe un terror que inoculado está en nuestra mente

Un despojo que no podemos controlar

Una mirada del mundo que nos aleja hacia lo profundo

 

Y no hay más esperanza

Y no sabemos leernos ni a nosotros mismos

Siendo tan fácil el error que disipa nuestra alma

 

Y hay furia que ya no debe de ser reciclada

Un grito que no admite más ser ahogado

Una lágrima que ya no alivia

 

Es pues desesperada también esta calma

Es inquieta esta rutina de comprender la rutina

Entre caracteres que desgastan virtudes

 

No sabremos nunca lo que queremos

El deseo no se satisface nunca

Y solo nuestro pecho se convierte en un vacío más oscuro

 

Qué importan las palomas o la calma

Ya no hay paz que sea contemplada

A menos que se desgarren las miradas del pasado

 

A quién se debe de pedir perdón

Si el futuro que se avecina no tiene nombre

Y ya no podemos inventar más un consuelo