Sonriéndole a la fortuna
Va en el camino Miranda
Que al contonear su figura
Deja saberles quién manda
Al piropero de fórmula
Quien lo único que trata
Es hablarle con dulzura
Y ella al carajo los manda
Que difícil es la vida
De este simple jornalero
Con su intento; no le atina.
Difícil: es ser sincero.
Por querer a la vecina
Le quitaron el empleo.