La venganza
Soñé que la otra noche, sin alas yo volaba
incrédulo flotaba, ligero cual garceta
y cojo sin control de bastón y de muleta
haciendo mil piruetas el aire lo rasgaba.
Parece que Morfeo travieso se burlaba
con cárdeno disfraz y encarnada birreta
cantando un sacro salmo tocando pandereta
entrando yo en barrena de culo aterrizaba.
Que cosa tan extraña Morfeo con su antojo
parece que aburrido montado en carcajadas
le llega la ocurrencia que convertido en cojo
mi mal aterrizaje le causa risotadas,
pero con mi venganza presiento ya su enojo
se trata que a su cama le he echado tres meadas.
Malco