En el andar de mi vida
yo tengo una compañera,
se parece a un a mentira
porque pasa inadvertida,
pero es la pura verdad.
Es igualita a mi vieja
cuando de reprochar se trata
pues se hace la que no sabe
y lo está sabiendo todo,
no se la puede engañar
Si salgo temprano,
aunque no diga destino.
si me necesita, siempre busca,
dónde, me va a encontrar.
Si cree que estoy pecando
discretamente me ignora-
pero, si me ve triste, llora.
porque presiente el porqué,
Me lleva por buena senda
y si, pretendo hacer de las mías.
grita como una tía,
le duele verme fallar.
Adonde quiera que voy
siempre converso con ella,
pues me sabe aconsejar.
Mi gran amiga la huella.
que es como la estrella.
que me alumbra en el andar.
Me acompaña siempre
en las buenas y en las malas,
cuando caigo me levanta
y me ayuda a caminar
Ahora si me ve alegre
no se imaginan lo que hace,
si hasta se la ve bailar.
En todo se parece
a mi Ángel de la guarda,
el que cuida mis pisadas,
que van quedando marcadas
como si fueran pintadas.
¡Ay! mi huella querida,
siempre unidos, la muerte
nos pillará.