Maikel Mendoza

Plegarias por mi país

Plegarias Por mi País.

                                    

 

Señor, tengo interrogantes,

 Y disculpa mi imprudencia

al venir a tu presencia

afligido y suplicante,

hay un motivo importante,

por eso pido tu audiencia,

mi país por la violencia,

ya se encuentra agonizante.

 

La maldad esta campante,

Las drogas y delincuencia,

Contagian la adolescencia,

De una manera alarmante,

La educación no es la de antes,

No hay respeto ni decencia,

Y hogares en decadencia,

Los divorcios son constantes.

 

Se ve el campesino errante,

Desplazado en la indigencia,

Pues le han quitado su herencia,

Las fuerzas beligerantes,

Secuestran a los infantes,

Sin tenerles condolencia,

Pagando las consecuencias,

Y esto hace que me quebrante.

 

El pueblo pide incesante,

Que acabe la indiferencia,

Y aquel que está en eminencia,

No busque solo votantes,

Que sea un buen representante,

De honestidad y eficiencia

Y mi país sea potencia

Brillando como un diamante.

 

He madrugado a buscarte,

Creyendo en tu omnipotencia,

Por eso con reverencia,

Señor quiero confesarte,

Que me preocupa bastante,

El mirar tanta insolencia,

Y mi pueblo en emergencia,

De ti Señor tan distante.

 

Respondió Dios al instante,

Me hablo con gran insistencia:

Es por la desobediencia,

Que esta tierra esta sangrante,

Pero si sus habitantes,

Vuelven a mí en obediencia,

Yo sanare sus dolencias,

De la paz seré el garante.

 

Sus hijos serán brillantes,

Guardare su descendencia,

Mostrare como evidencia,

Un arcoíris radiante,

Habrá economía pujante,

Donde no haya inconsistencias

Y sirvan con transparencia,

Ministros y gobernantes.

 

Un buen trato al semejante,

Dará el médico de urgencias,

Será imparcial la sentencia,

Que dicte el juez al maleante,

Y el que las leyes quebrante,

Pagará sus penitencias,

Transformando sus conciencias,

Que de amor sean detonantes.

 

Y tendrán los estudiantes,

Educación de excelencia,

Y el campo gran referencia,

Por cosechas abundantes,

cuando el hombre tolerante,

acepte las diferencias

 y con respeto y prudencia,

 dialogue con su agravante.

 

Que sus hijos se levanten,

Dios espera con paciencia,

Que clamen con persistencia,

Y el país saldrá adelante,

Para un progreso importante

Les traigo esta sugerencia,

Cristo en su magnificencia,

Solo en El, somos triunfantes.