José Luis Barrientos León

 Eva Luna

 

Eva Luna, creación y luz,

canto de mar en caricias de su oleaje,

canto de arenas en equilibrio del paisaje,

canto sin tregua entre brumas y celajes,

canto en la tarde con sonidos colosales.

 

Nacerás del frescor de la tierra verde,

de la montaña con su cobertura de rocío,

donde la bruma besará nuestros rostros,

cuando tus infantes ojos se abran a la vida.

 

Serás pasión y delirio desbordado,

como ola que se encrespa en el mar embravecido,

como espuma que se entrega en el litoral emancipado,

como verso que se diluye en un poema liberado.

 

Eva Luna, serás luz que se confirma en el brillo de tus ojos,

vestida de tierra herbosa con aroma de los pinos,

derramándose como miel desde lecho de tu cuna,

hasta alcanzar el umbral inmortal de tu sonrisa.

 

Has llegado al hogar como un milagro florecido,

como pétalo de un beso en la frontera del espíritu,

cual luna duplicada llena de gozo y gracia,

cuando tu deslumbrante amor ilumine nuestros pasos.