Cortemos lazos entonces, no te buscaré ni tú a mí, de todas las redes nos eliminaremos, evitaremos hablar del otro y dejar de pensarnos aunque de todo lo antes mencionado esto sea lo más difícil, el ser humano por naturaleza tiende a desahogarse algunos en copas otros en cigarros en mi caso lo hago con una pluma y un papel donde escribiré sin mencionar tu nombre pues no hace falta, ya que bien sabes que es para ti y cuando leas mis poemas obvio me recordaras intentaras no hacerlo, pero fallaras y hay me sentirás cerca otra vez como aquella tarde cuando te leí mis poemas, reímos y nos despedimos ¿Culpa mía? No es pues la tinta cobra vida al tomarla y a ella no le puedo mentir ni encubrir mis sentimientos ni mucho menos a la luna que sabe que muero por escribirte, hablarte y por supuesto besarte más repito somos humanos y el maldito orgullo puede más aunque siempre tiembla cuando ve llegar al amor... Respiro y continuo; tú estarás con él y yo con ella engañándonos diciéndonos que no podríamos encontrar a alguien que nos haga más felices que estos desconocidos lo cierto es que en cada beso que te da cierras los ojos e imaginas que soy yo más nunca te besaría tan mal y eso lo sabes bien, yo la tomaré de la mano y caminaremos, mientras pensare cada palabra que diga para que tu nombre no sea pronunciado. Más una vez leído todo esto me surge y problamente a ustedes también, una pregunta a la cual creó tengo la respuesta ¿Para qué? Para que todo esto, ¿Para qué pelear? Claro si en algún momento nos reconciliaremos y todo quedara en un momento más de nuestras vidas entonces ¿Para qué? Más sin embargo ya di la respuesta y es que esto es necesario pues si, en algún momento lo recordaremos y reiremos más habremos entendido que el orgullo solo estorba al amor y los desacuerdos que tuvimos se pueden abordar y habremos entendido el secreto del amor que no he escrito en este poema más sin embargo si leíste bien ya lo abras descubierto he incluso experimentado querido lector.