Era blanca su textura
antes que el puñal entrara
y por dentro arrebatara
todo el fruto de natura.
Y al morirse quedó oscura
sin haber quién la librara
del puñal que la cortara
para hacer una mixtura.
Pero quien su piel cortó
con la fuerza de su mano
en aquel frío verano
una lágrima lloró
bajo aquel verde manzano
porque herida… ¡se vengó!
Ahora pregunto yo:
Y… ¿Quién murió en cautiverio,
cuál será el nuevo misterio?