Sangra mi pluma por ti
mosa y dueña de mis letras
queriendo en vano zurcir
el vacío de tu ausencia.
Mi agenda espera tu cita
desde aquel último encuentro
donde entregué el alma mía
más allá del mero sexo.
Debes pensar mosa amada
que estoy fuera de mi juicio
por soñar en que mañana
podamos estar unidos.
Como el páramo y la nieve
el volcán y las cenizas;
no veo la hora de verte
y entregarte mis caricias.
Mi amor es un pajarillo
en el cuenco de tus manos
tú ves si le das cobijo
o liberas de tu abrazo.
Tienes la flecha dispuesta
en el carcaj de tus labios.
Soñaré con tu silueta
y el suave andar de tus pasos.
W.M®