Debí amarte más lento
y olvidarte más rápido
ahora de ti vengo
con tristeza y nostálgico.
Mi llanto es llanto interno
como agua en la caverna.
¿Ves?mi alma no fue de hierro
ni mi corazón piedra.
Por fuera una sonrisa
ilumina mi cara
y por dentro agonizan
mi esperanza y mis ganas.
¡Oh capricho del cielo
que tarde apareciste
para romper mis remos,
y en tu mar, lento hundirme !
Ya no circula sangre
sino tinta en mis venas,
creerán que es alarde
pero es una condena:
Un juicio contra mi Alma
a mala hora llegado
que tornó en gris nostalgia
la poesía que amo.
Mosa, si un día vieres
estas letras pueriles
recuerda quien te quiere
por más de que lo olvides.
W.M®