PENSAMIENTO ...
Y, aquí estoy, leyendo viejos poemas, soportando este dolor que lento me devora, con cuanto amor voy entrando en ellos, recorro sus caminos, me pierdo en sus laberintos, penetro en la tristeza de sus versos, buscando el alma de su autor para preguntarle:¿A caso sabías de mi dolor? ¿O, es que también tú has sufrido tanto y tanto como sufro yo? Y me pregunto: ¿Quién besará hoy esos labios que ayer me besaban con inmensa locura? Un sollozo intermitente, angustioso, sale de mi pecho, bañando mi alma inconsolable, como una sinfonía de dolor, hecha de esperanzas perdidas y de sueños marchitos.
Siento mojada mi mejilla al terminar de leer y quedo solo frente a mi dolor, este dolor que me atormenta, pero que no me mata… Al menos todavía…
KIN MEJÍA OSPINA