César Ortega.

Instante

Solo somos tú y yo.

Avanzando lentamente.

Tremulos, taciturnos.

Solo somos tú y yo.

 

Vivimos temerosos de entregarnos.

Solos por un instante, misterioso momento.

Dichoso espasmo en que estamos solos.

Vivimos con miedo a boicotear esto.

 

Tus manos frías claman el calor de las mías.

Mis labios insensatos no resisten tus besos.

Tu presencia llena de alegría mis días.

¿Será acaso que te vuelves musa de mis versos?