Despertaste de un largo sueño,
acumulaste presión por años
y ahora despliegas tu furia:
Escupes lava y ceniza,
ríos de roca fundida
dejas a tu paso,
columnas de vapor y humo
que siembran temor.
¡Oh Madre Tierra!
ya cansada y enferma
por la mano funesta del Hombre,
te abres las venas para liberar
el dolor y las lágrimas
por tanto tiempo contenidas.
¡Oh Madre Tierra!
no desampares a tus hijos descarriados
y cierra ya tus heridas
para que conserven la esperanza
de que en ti siempre tendrán un hogar.
Lucila De Melo(MMGA)
Uruguay