Por qué me cuesta despedirme de los sueños
por qué me cuesta renunciar a tu cariño
por qué recuerdo lo que no viví jamás
y por qué creo que muero si no te tengo más...
Podría decirte adiós
pero le estaría diciendo adiós
a todo lo que mi corazón construyó
y a todo ese mundo que no existe
pero que hasta hoy sostiene mi vida.
Por qué me cuesta olvidarte
decirte adiós simplemente
mirarte a los ojos, no bajar la mirada
y con el alma en la mano, darte el último abrazo.
Por qué me cuesta tanto rendirme
dejar de luchar, dejar de amar...
Por qué sigo aferrada a este luto constante
por la muerte de todos mis sueños...
Ahora sé se acabó el camino
que tengo que saltar para salvarme
que tengo que morir para vivir
y que tengo que volver para existir...
Por qué esta vida
solo me enseñó a defenderme
Y nunca a soltarme
ni alejarme de lo que me hace daño
de lo que no me hace bien
y de lo que mata mis sueños.
Por qué el tratar... es siempre perder
y el amar es un suicidio
una locura, una herida mortal
una mentira
y una estúpida agonía.
Ana María Indacochea Garreta
Seudónimo: Socorro Andrea