El tiempo se me consume pensandote,
cada respiro me despoja mas de mi
y me acerca mas a ti,
sin saberte, ni conocerte,
sos un laberinto del que no hallo saida,
un poema que nunca escribí,
el final de una canción que jamás escuche
y que resuena en mi mente cada mañana al despertar
y cada noche antes de dormir,
demostrando que no me pertenezco,
sos mi amable esclavitud
y mi torturosa veneración,
un sueño del que no quisiera despertar,
aquella caminata de la que jamás me cansaré,
aunque mis pies se laseren y mis piernas se entumescan.
Quisiera escribirte y dibujarte,
retratarte y esculpirte,
pues para mi, el arte vive en ti,
aunque para ti, un error viva en mi,
no tengo elección
y se que no me has de elegir,
pues entre tu voz y la mía,
solo un suspiro.