Cada huevo depende de su cáscara (Alejandro Díaz)
Les contaré mi experiencia
visitando un centro comercial
cuando hice a mi vestimenta
gran renovación total.
Me compré unos pantalones
con dos inmensos bolsillos
pues el pago de mis labores
es con dinero sencillo.
También compré una camisa
con estampados de colores
pero al medírmela la volví trizas
ajustando sus botones.
Aprovechando compré zapatos
¡Ay que buena compra ésta!
como me salieron baratos
mis callos están de fiesta.
También me compré una corbata
de suave color pastel
y la tela es tan barata
que es buena para un mantel.
De medias me compre un par
eran tobilleras amarillas,
y de tanto y tanto halar
me llegan ya, a las rodillas.
Quise Comprar una chaqueta
pero no me alcanzó el dinero,
por eso es que los poetas
vestimos a lo ligero.
Hasta la ropa interior
la pude hallar en oferta
sólo le pido a Díos
que haya saldo en la tarjeta.
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