Si buscas las razones
que me impulsan a quererte,
búscalas en la caricia
de la brisa al besar el mar,
en el juego eterno
de las olas con la orilla.
Tal vez las encuentres
en la risa encendida
de un niño que juega
con su pelota de trapo
un sueño redondo
que danza sobre el polvo.
O quizás las halles
en las hojas que giran,
cuando el río se abandona
al abrazo silencioso
de la luna errante.
Pero si las buscas
en la hondura de mis pupilas,
que atraviesan la distancia
para encontrarse con las tuyas,
allí las verás, sin dudas.
Autor: Gustavo Echegaray A.
03.12.2022