La vida sigue
y cada año renacen los geranios
que cultivaste
como protagonistas del balcón
que dejaste abandonado
con sus colores vivos
que florecen todos los veranos
tercos geranios que me reclaman
que se debe seguir soñando
y me miraré al espejo
y ya no me sentiré viejo
o quizá un poco pero tu nombre
ya no estará en mi sueño
y cuando me agobien
las desilusiones y el aburrimiento
disimulare que ya ni te recuerdo
aun cuando tu canción favorita
suene en la radio
dejaré de hacer prosa
y será porque tu memoria
ya no me haga daño.