Raúl Bonilla

Noviembre 26

I

El cielo estrellado luce amenazante

Desde el balcón de mi cuarto

Hay tantas estrellas en el firmamento, como minutos esperando tu llamada

 

Quisiera sentir tu respiración en mi cuello

Pero estoy solo en esta banca

La verdad ya no importa

El trabajo de la universidad espera en el escritorio

 

¡Qué lejano parece el beso de ayer!

Cuando se fundieron nuestras almas

Pero por lo que veo, soy el único que lo extraña

 

II

El frío sacude mis huesos

Y el murmullo del viento trae ecos de otras épocas

Porque sigo pensando en Ella

 

No es el mismo balcón, pero si la misma soledad

 

Ella duerme en un sueño, con el lago rodeado de amarillo y rojo

Está en la habitación de al lado

Pero aun así es medio mundo de distancia

 

Yo hace mucho no duermo

El deseo se transformó en insomnio

Con su hermosa cabellera negra y sus ojos marrones como el paisaje de otoño

Ella no sabe que la noche ya no me pertenece

 

III

Precipicio perfecto

Desde donde saltar

No tiene fondo

Solo el antiguo lugar donde quería soñar

 

En las alas del destino, o en el viento azaroso

El viaje no es redondo

Y aunque quiera, la vida que dejé no regresará, porque fui yo el que decidió mirar abajo y saltar