Mi cautivadora prisionera
De ojos ancestrales
Si tú te duermes en mi letargo
Te prometo que no sentirás
Aquel dulce amargo
De los arrabales
Si tú te duermes en mi resguardo
Procurare firmemente, estar hay
A tu lado
Si tú te duermes en mi palacio
Juro solemnemente
Acompañarte hasta el jardín
De los no olvidados
Si tú te duermes en mi aurora
Créeme, no te dejare ir
No ha llegado tu hora
Contemplare el hecho más fugaz
Y decidiré estar contigo
Aunque no despierte jamás
Pero de algo puedes estar muy segura
Si tú te duermes en mi corazón
Te guardare un espacio
En lo más cercano de mi laguna
Laguna de cisnes adorados
Encaminados a presenciar
El acto noble de verte
Dormida
Entre mis sueños más angelicales
Ante mi devoción
Fin.