Robar al sol
los rayos que nos deja,
era su sueño.
Porque esa presa
de luz y fantasía
tenía magia.
También las nubes
quería capturarlas
con una caña.
De complemento,
estrellas como velas,
atraparía.
Todo por ti,
la humilde compañera,
de mil jornadas.
El Peter Pan,
soñaba para Wendy,
de esta manera.
Pequeño mundo
de paz y fantasía
en la niñez.
Esa niñez
eterna y sin fronteras
que tanto ansiamos.
\"...Quiero pescar
los besos a los sueños
para tus labios...\"
Rafael Sánchez Ortega ©
07/12/22