No hacen falta palabras para decir
lo que sabe el cielo;
lo que saben los sordo,
lo que saben los ciegos.
Todos los silencios lo dicen,
y yo decirlo, no puedo...
Por eso los animales no hablan:
de muchas maneras expresan sus sentimientos.
A eso le llaman instintos,
que la mayoría de los humanos
desconocemos.
¡Aplícate el cuento...!
Si al menos tuvieras instintos
quizás ya sabrías
lo que hace tiempo ya sabe el cielo...
¿Cómo no te das cuenta,
si hasta los silencios gritan
lo que yo no puedo...?
Si al menos yo tuviese instintos
y como un animal fuese más violento,
me importaría poco
lo poco que tu marido tiene por dentro...
Entonces ya tú sabrías
lo que hace mucho tiempo sabe el cielo...
¡Aplícate el cuento!
Frank Calle (13/ dic./ 2022)