Patricia Aznar Laffont

Degüello

La Tarde lame la Herida

del Árbol del Principio y de los Fines,

El Ocaso conjuga la Hora de los dioses

que escuchan el Silencio Temprano

de un Ahogo del Vapor Inmaculado

en un Horizonte que se apaga...

 

En los Océanos y en viejos Vendavales

Un hacha muerde las Olas...

 

Es la Prístina Distancia

entre un Hombre que calla

y una Luz 

que deshace el Derrumbe del día...

 

Párpados sin Noche...

 

Insomnio que sordo Ciega...

 

Degüello del Ave que no Sueña

y de aquel Papel arrugado y sin Cara

de un Hombre que jamás Vivió...

 

( Patricia)