VEN.
Soy silencio en tu suavidad,
acogiendo tus latidos en los míos,
eres fuego y eres paz,
despertando mis sentidos dormidos.
Tú eres despertar de alba tempranera,
vehemente palpitar del corazón mío,
eres brasa, eres flama y eres hoguera,
cuál sol abrasador de fulgente Estío.
Y voy abrazando la fría soledad
en las horas de ausencia mortal,
mi sombra está vacía, cruel tempestad,
ese tiempo cuando aquí no estás.
Yo soy ese abrazo dado en soledad,
que sin tiempo cohabita tu alma,
soy a tus tormentas serenidad,
aliento, motivo. Paz y calma
Derrama lluvia en mi atardecer,
limpia los caminos de espinas
antes que el día llegue a fenecer
acabando con las pasiones escondidas.
Y tu atardecer que lluvia clama,
entre caminos de cardos y espinas,
mi aliento será aluvión a tu alma,
y mis labios besarán tus heridas.
Ven y mitiga las ansias de amor,
acaricia esta luna que te llama,
sé mi sol esparciendo rayos de calor,
sé mi mar humedeciendo mis entrañas.
Siempre estoy amor en tus ansias,
apeteciendo incólume tu deseo,
y en el humedal de tus entrañas,
sentirás el clímax de mi devaneo.
Ven, y ven...ven...ven...
No te sientas sola no hay distancia,
ni me llames entre lontananzas,
en tu alma estoy si me piensas,
y en tu corazón si me clamas.
Autor: Tarde Gris (Blanca N. García González)
Seguimiento de: Víctor Santa Rosa.