Si cargas remordimiento
que no te deja vivir,
perdona para seguir
por la vía sin lamento;
perdónate ese momento,
vuelve otra vez a reír,
y procura no sentir
nunca más ese tormento;
una vida sin presiones,
es relajada y hermosa,
nos libera de tensiones
que se torna primorosa:
sanar nuestras emociones
nos da una vida exitosa...