Sencillo fue,
sencillo como un pico
de incertidumbre.
El humo cubre mi pasaporte
y sólo puedo decir:
“La nuca de los cadáveres
sabe a infierno enternecido”.
Sencillamente me molesto
porque Cristo murió y yo aún vivo…
Rara versión de esta película protagonizada
por falsos profetas y estúpidos artistas.
Sencillo y simple,
amor de amar y amor ajeno.