Carlos Ojeda

Lápiz, ya me hueles….a café.

 

Lápiz, ya me hueles….a café.

 

Oh, poeta de pueblo,

viejo como sus

calles y portales,

te escondes

detrás del silencio

que rompes,

cada vez que escribes.

Oh poeta,

artesano de letras

que en cada verso

te la juegas.

Cuando el equilibrio

es difícil de mantener

tú alma sufre

tú alma llora.

Sea tu lápiz

el instrumento que hable,

….con el separas

la realidad de la ficción,

lo bueno de lo malo.

Con su filo ardiente cortas

y por descuido

más de una vez

te has herido….el alma.

Quien ha dicho

que el escribir es fácil.

Sin hacer agravios

pesas la verdad

pesas la mentira

fábricas ilusiones

rompiendo mas de un sueño.

Lápiz, lápiz….que no dejas

de escribir.

Lo oscuro de tu grafito

puede iluminar el rostro

de una mujer enamorada,

cuando lee a prisa,

las letras

que en un papel

el amor dibuja.

Vuelve a lo tuyo

y no te pierdas

que muchas jornadas

de insomnio….te esperan.

Mantén lista tu punta

y escribe mi sentir

que ya me hueles a café

en esta noche

….sin dormir.

                 Amigos míos.