Con hilillos de ilusión y agujitas de esperanza, voy a coser un vestido a los te quiero, que en el alma se me quedaron aquella noche de madrugada.
Con telita de sentimientos bordadas de suaves caricias, voy a cubrir los suspiros que de tus labios brotaban aquella noche de madrugada cuando nuestras almas desnudas una a otra se ganaban.
Con encaje de pasión, hecho con bolillo eterno, tejeré un traje de boda que no será para mi cuerpo. Lo guardare en un lucero, y se lo pondré a nuestros besos, cuando otra noche de madrugada compartamos nuestros cuerpos. 26-11-2004