EndimiĆ³n

Bailemos.

La música paro, pero seguimos bailando, ya que en realidad, que la bocina sonará no importaba pues nos sujetamos de las manos y ya nada nos hubiera hecho parar, tu cabeza sobre mi hombro usando tus brazos para rodear mi cuello mis manos en tu cintura y logramos por un momento parar el tiempo o por lo menos eso sentíamos pues oíamos al mundo discutir, pero estábamos ya, en una dimensión diferente donde lo importante no era otra cosas que no fuera hacer de ese momento lo más largo posible.