Carlos Armijo ✒️

A MI MUELA...⚧

 
No s​é si serás poema
o una simple oda,
quizás una triste elegía 
o finalmente sólo prosa;
Este será mi homenaje,
compañera de tantas comidas,
de a poco te fuiste alejando 
porque ya estabas herida​…
 
Tantos años junto a mí
y nunca te quejaste​,​
hoy te has fracturado
y de mí te han alejado;
Siempre fuiste muy leal
aunque a veces me mor​días,
a quién le iba a reclamar
sí era yo ​mismo ​quien ​lo hacía…
 
Eras la número treinta y uno,
la penúltima de la fila,
diste una gran pelea
y en trozos te sacaron;
me mostraron tus despojos,
un macabro rompecabezas,
lágrimas asomaron por mis ojos,
pensé: he de hacerle un poema…
 
Reconozco me hiciste sufrir,
una sensación desesperante,
partiendo desde los molares
y llegando hasta el oído;
tomando desde analgésicos
hasta algunos antibióticos,
al final me quedaba dormido
con un sueño anestésico…
 
 
En mi boca ya no rimas,
de mi risa hoy te ausentas​,​
un espacio me has dejado
con un punto de hilo negro;
El viernes ya me lo sacan
y con él tu recuerdo,
extraño que no me duelas,
sólo quedará un hueco
suspirando entre mis muelas…
 
No reflexiones mi poesía...vívela
 
La amenaza de un caramelo llamado sacamuela.

Recuerdo cuando aún era niño
en la quincalla de doña Estella,
se vendía un dulce sacamuela
y lo expendía con gran cariño,
como ñapa obtenías un guiño
y luego de la compra efectuada,
al dentista hacían la llamada
en caso de dulces en exceso,
con las niñas a cambio de un beso
era muy ocurrente jugada.

Hoy con esa etapa superada
esos dulces desaparecieron,
por cruel orden de quienes dijeron
hay una amenaza declarada,
el oficio dental va en picada
con esos benditos caramelos,
pegados del paladar al cielo
pero nunca a un colmillo o molar,
deploro el progreso bipolar
los juegos e infancia por el suelo.
Hermes Varillas Labrador.