Me escondo tras los silencios
cual vaticinado eclipse del espacio,
allá donde las ondas radiales quedan mudas,
y un aficionado encuentra su fortuna.
Así es la poesía que siempre me regalo,
cuando ya en mi mente no queda ninguna.
Música perfecta que captan mis sentidos
sin cuestionarme si el autor soy yo, o la Luna...
Nace así este primer poema del año,
que sale de golpe por mi inquieta mano,
sin poder siquiera sacarle la punta.
y sin darme tiempo a pensar en la Luna,
Por fin puedo ahora mirar a los espacios
dejando que el poema se escape entre la bruma.
Respiro profundo y me entrego a tus brazos,
escuchando en la distancia el Claro de Luna...
Frank Calle (2/ enero/ 2023)