Noche de plenilunio, estás a mi lado y el silencio reina
Pero no del todo, las estrellas en su titilar susurran
Un pensamiento venido de quién sabe dónde se instala y crece en mi cerebro
Hay perfumes en el aire y mi piel se enerva, ansiosa de expandirse
La quietud entre ambos incuba ese deseo, y mis dedos
Impulsados por esas ansias suben y bajan
Bajan por tus miembros tan conocidos buscando una rendija
Vibras, acercándote al umbral de las delicias
Con cada toque, con cada respiración acompasada
Crecen y se expanden los sentidos
Los dedos, los labios, avatares develando los arcanos contenidos
Entre las curvas, los recovecos, las aristas,
Beso a beso, como átomos cargados de erotismo
Se unen y separan en incontables ecuaciones
Las articulaciones eufóricas danzan entre la sorpresiva vorágine
La mente disparada en el delirio llena su cielo de colores
La pasión aporta el ritmo, la fantasía en atuendo
Vistiendo los cuerpos en cada vaivén desenfrenado
Y entran luciérnagas, entran las flores, después el jardín entero
Tu mundo y mii mundo en conjunción
Expanden sus sentidos, crean sus propias nebulosas
Su sed apasionada no conoce límites
Y es tromba, es haboob, asteroide que penetra la atmósfera
Con paso incontenible
con un restallar del suelo herido que sube en un gemido triunfal
el silencio reina de nuevo
pero no del todo