A veces pienso en el mar.
Hace mucho tiempo
que no entierro mis pies en la arena.
Hace ya muchos años
que no siento el sonido de las olas en mi cabeza.
No he sentido el ardor de la sal
ni el golpeteo del oleaje en mis entrañas,
todavía siento el vacio de añorar las frias aguas
y adentrarme en la salvaje marea.
La cabeza me da vueltas
sobre hace ya varios años
que extraño volver al océano
a reparar los daños del pasado
y sanar la tristeza de varias desgracias.
A veces pienso en el mar
y en lo mucho que me hace falta
reparar mi alma maltrecha
a través de las olas,la arena y la playa.