Desde el latido mismo
el universo expresa el designio.
El verbo es amar,
la vida el lugar
y el tiempo su ritmo.
Mientras el dedo señala el futuro,
el futuro no cambia; los deseos son eso:
túneles que penetran la montaña,
la inexorable montaña.
Pero el verdadero tesoro es de fuego,
es una hoguera que existe dentro;
existe antes que nada ocurriera
incluso antes que la montaña.
Es una estrella y es inexpugnable
tan sólo se expande;
he ahí el abismo
ahí el cauce.
César C. Barrau
03-01-2023