Enero,
has vuelto a mí de nuevo,
y con tus agoreros aires de carnaval,
vas tejiendo los dìas apenas comenzados
repitiendo un futuro parecido al de ayer.
Enero,
como siempre el primero,
en tu lista los sueños estàn recién nacidos,
borrando los olvidos, dándolos por perdidos,
con una irresistible manera de mentir,
que me parecen ciertas, tus promesas esquivas,
en estas ansias vivas, de soñar y seguir.
Enero,
cuando te estreno quiero
abrazar en el cielo a los que ya no estàn,
o juntarme con ellos en una eucaristìa,
y comulgando juntas sus almas y la mìa,
hacer de nuestras vidas un solo porvenir.
Enero,
ya que no eres sincero
no te preguntaré, si traes la respuesta
para lo que me resta, en horas y segundos,
donde juntando cielos y amalgamando mundos,
mis sueños de poeta vuelvan a florecer,
o su perfume vague, silencioso en el viaje,
donde no he de volver.