Para lucir la labor de sus sas3
cada barriada invoca a sus 11
cada uno con su propio jerig11
héroes, santos, cojos y pillas3.
El primer gol nos gritaba desas3
cada patada era al crisol del br11
se laceraba el campo y cada g11
hasta ver las playeras como las3.
Se les enciende el ego a los porru2
los hinchas, el portero y un ter0
y entran en el estadio cual cornu2.
Hay uno y otro pillo o carni0
que golpea dejando cual zancu2
sangre esparcida en gotas de agua0.
Es la portada de tantos parti2:
Cuando los hinchas son más qué aguerri2