Como esos besos mismos
que se pierden en la boca del cielo,
así quiero perderme en el laberinto
que guarda tu cuerpo.
Quiero perderme y sin salida
como si fuera un beso
que en el alma se anida
y se convierte en lucero.
Quiero inundarte por dentro
desde el cielo hasta el mar
como si fuera lluvia que en silencio
te canta sin parar de bailar.
Quiero que me bebas
como si yo fuera agua,
como si tu fueras tierra
con la flor que guarda el alma.