Poema reconciliador
En tu pecho puedo tu corazón oír
como late ante lo que te seduce
esta noche tu cuerpo es más dulce,
sin rehusarse a lo que quieres sentir,
y sabes que estoy enamorado de ti
abstenernos de rompernos el corazón
aunque sintamos tener la razón,
hagamos el amor y no la guerra
porque la vida no será eterna
y en el recuerdo quedará la pasión.
Alma, te he escuchado llamarme
ábreme tu corazón y tus brazos,
si debo vacilar no será al amarnos,
la religión no hará que deje de desearte
y si tu familia quiere de mi cariño apartarte
aprendí a reconocer la luz cuando la veo,
camino hacia ella y busco darle un beso
con la esperanza de que pueda iluminarme
y extraer todo el calor que pueda darme
con mimos de tus manos en todo mi cuerpo.