El Alma
Escuchando el tañer de los cristales,
son carillones del alma en el viento,
colados a través de ventanales,
me irrumpe aquel hastío frío y lento.
Con bóvedas sonoras a mi lado,
respinga como bolas de pimpón,
el maligno eco de gris desolado,
veo en mis pesadillas vil ratón.
Mi alma optando por huir del escenario,
socava en su delirio, un dulce instante,
mientras un arlequín estrafalario,
se mofa con su danza escalofriante.
¡Alma, alma! Clama el alma, mas no hay calma...
¡Trozos del cristal, barre hoy una palma!
Tommy Duque
Jan 5 2021
Riverview, Michigan.
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