Si algún día, al encontrarte frente a Dios,
recuérdas quién te amó en verdad,
hazle la pregunta a ÉL,
y la respuesta sabrás.
Más ÉL, te contestará:
\"Quién mucho, por tí, sufrió\".
Tú, le dirás de este modo:
\"Señor, por mí, nadie, jamás sufrió\".
¡Qué insensata éres, al no recordar aquel amor,
aquel amor que un día, lo arrollaste de dolor!
Señor, no soy traisionera, solo quería jugar.
su sentimiento ignorante, me hacía regocijar.
No hay sentimiento ignorante en el juego del amor
sólo hay ignorantes sin sentimientos,
que no tiénen corazón.
En las líneas que te dí, Oh Dios!,
te pido para ella el perdón,
aunque en su ignorancia y su orgullo,
se robó toda mi ilusión.
-No os preocupéis, hijo mío,
tú, ya tiénes tu galardón:
\"Que en el amor no hay vida, si en la vida no hay amor.-
mvdDsp-18306-ncbt-1348(s)-By:Jorge L. Casado