José Luis Galarza

Basta un instante

Un instante fugaz me paraliza;

una lid, un segundo;

un instante fecundo

con un guiño estelar no finaliza.

Su destello que impacta profetiza

placentera su suerte

al despertar y verte

la emoción está a punto de estallar,

el instante, al final, sí va a llegar,

y lo sé… será un fuerte.

 

Así será, un camino

-que no sea un desplante de lo amargo,

cuya sonrisa sea tu descargo-

del despliegue devino.

La verdad del destino

-hoyuelos e inocencia

y niñez y sabor a complacencia

el placer trepidante-

es la respuesta amante,

la frescura, la urgencia.

 

Un instante revivo

que los males desguaza; su bondad

es el dulce sabor de la verdad,

la paz con que convivo.

Corazón intuitivo,

y tempestad intensa del segundo,

tamborileo claro en lo profundo

resiste los embates

prepara los combates

fruto del vientre, musa de mi mundo...