Hace falta esa tarde traicionera
sin mirar las horas, sin la media vuelta.
Un abrazo escabullido en la escalera
con la timidez de una puerta cerca.
Hace falta un aguacero en tarde fea
que por la humedad, no nos vean de afuera.
Con el tiempo remolón, caricia nueva...
Un estoy contigo, sea como sea.
Que recorran las miradas por las sedas
sobre aquel sofá, la ventana abierta.
Y reír de las tristezas y las penas
que se consumieron entre copa y vela.
Hace falta esa locura entre palabras
Para enmudecer... ¡Que no falte nada!
Entre tanto, escribir sobre tu espalda
y tras el silencio, enloquezca el alma.
En un baile de salón en losa estrecha
degustar el día, que marcó la fecha.
Y en la aurora, viendo despedir la vela
con cada detalle, mi mejor poema.
Sé que besas al leer, con tu mirada
y que en cada verso, encuentras mi alma.
¡Tú bien sabes cuántas cosas hacen falta!
Y no digo más... ¡Porque no hace falta!
Autora: EmitzaSR.
De Cuba.💕