Y me dí cuenta
Que me enamoré
De tus rosas azules
y del aroma que tienen.
Y me dí cuenta
Que me encanté
Con quién las cuida
Cómo si fueran su familia.
[Meses antes]
Vivimos en mundos distantes
Yo en las sombras
Luchando por sobras
Esperando la lluvia
\"Robando sonrisas\".
Vivimos en clases distintas
Tú en la cima
Cansado de la monotonía
Aburrido de la vida
Esperando la primavera
En soledad, completa soledad.
Nunca fuí alguien que importara
No en la vida de mi familia
Ni en la vida de los que conocí.
Solo voy vagando por aquí
Voy de paso, dónde el sol es fuerte
Dónde las flores crecen
Dónde no hay más gente.
Ví un montón de chatarra, parecía el lugar ideal para ocultarme, me perseguían
¿Por qué?
Porqué es divertido ¿no crees?
Aquí abajo todos juegan
No todos jugamos lo mismo.
Escalé hasta llegar
A ese campo oculto de flores
A ese hermoso lugar que el sol ama iluminar
Sentí el bello aroma de las flores
Estaban tan cuidadas
No fueron arrancadas.
Es la primera vez que veo tantas juntas
Sin que tema que alguien las pise
y se ría por verme triste.
Seguí éste camino de piedra
El camino que me llevó a tí
Encontré mares de rosas
Todas azules
Pero al acercarme a ellas
Entre tonos de violeta se convertían.
Estabas tú ahí
Concentrado en tus flores
Eras el ser más silencioso que conocí
Me acerqué a tí
Te miré a los ojos
En mi mente solo pensé
¿No me preguntaras cómo llegué aquí?
¿No me dirás qué alguien como yo no debería estar aquí?
Pero, pasaste de mí, me ignoraste.
—que ¿Tu vista es borrosa?!—
—¿O solo finges no poderme ver?!—
Moví mis brazos como una loca serpiente
Brincando de un lado a otro
Cómo hacen los conejos burlones.
Me asusté —¿Acaso estás muerto?—
Pregunté con algo de timidez
Pero comenzaste a reír
Y con una suave voz me respondiste:
—Sí, si te escuché—
—Sí, no puedo ver bien—
—Eres la mancha más ruidosa que conocí—
—¿Mancha?—
Quedé confundida y un poco molesta
Será un insulto verdad, solo en eso pensé.
—Manchas, son los rostros que puedo ver, solo las voces puedo reconocer y... el aroma de las flores, a ellas jamás las olvidaré—
Con una sonrisa terminó de hablar, parecía no molestarse hasta que lo oí suspirar.
—Estas flores cambian de color según tus emociones, son raras, podría decir que también caras ¿viniste a robar?—
—e, es.. no!— quedé nerviosa
Soy una ladrona, pero solo robo comida
No podía decirle eso, pero mi ropa sucia lo gritaba por mí.
—No hace falta que mientas, tal vez solo busques comida, te puedo dar un poco, pero solo un poco, no quiero que traigas más gente aquí– respondió con palabras frías, pero lo comprendí, yo tampoco quiero que más vengan aquí, dejaría de ser hermoso.
Esa mañana nos conocimos, me dió un poco de comida, era tan simple pero deliciosa, toda esa tardé me quedé ahí.
No parecía molestarle, pero si lo ví preocuparse
Tal vez no debería estar aquí
En un lugar tan especial.
Ví como pasó su día, era tan pacífica esa vida, pero era muy aburrida, necesitaba divertirse, intenté jugar con él, no funcionó.
Él vestía simple, caminaba lento, sus ojos me daban miedo pero su voz y olor, eran únicos.
Pasaron los días, continúe visitandolo a él y a sus flores...
pasaron los meses...